Institut Nova Història
Nuevas investigaciones del Institut Nova Història han certificado que el portal de Belem en realidad estaba situado en los arrabales de la histórica villa de Vic. El lugar parece corresponderse con la actual plaza de Santa Clara y no existe vestigio alguno ya que los sucesores del rey Herodes se encargaron de destruir el lugar. Jesüs era catalán, esto confirma lo que desde Wifré el Pilós todos barruntaban: El catalán es el pueblo elegido.
El ayuntamiento de la capital de Osona –es evidente la similitud sonora y gramatical con el rezo “hosanna”– ha solicitado a Puidemont que la Generalitat ha de asumir y subvencionar los altos costes de excavación necesarios para encontrar el pesebre que, a todas luces, está soterrado en la plaza de Santa Clara. El president parece que le ha contestado que espere unos mesecillos que en nada somos independientes y manará leche y miel de los cielos. –Y Euros– añadió.
Los Borbones
Otras líneas de investigación demuestran que los Borbones son descendientes directos de Herodes y por ello ostentan el trono de Jerusalén. Parece haber evidencias de un complot masónico-español de alcance planetario para esconder el origen catalán de Jesüs. Los sesudos investigadores del Institut llevan miles de horas recopilando información protegidos por tres brigadas de mossos de escuadra, que se turnan ininterrumpidamente, ya que existen serias sospechas de que hay planes para desmontar toda la investigación. Se sospecha que están implicados en dichos planes la TIA española y la Agencia Jerusalén Una y Borbona.
La estrella y la estelada
Finalmente el Departamento de Astrofísica de la Universitat de Vich, tras muchos seguimientos y estudios realizados durante años, ha logrado determinar cuál fue la estrella que orientó a los Reyes de Oriente hasta Vic. Sorprendentemente, dicha estrella –como no podía ser de otro modo– no es una estrella sino un cometa con unas características que han llenado de asombro a la comunidad científica del mundo mundial: tiene el núcleo con forma esférica y del mismo salen múltiples formas puntiagudas que, al verlas lateralmente, ofrecen la imagen de una estrella de cinco puntas, a la vez que la larguísima cola del cometa contiene gases en suspensión de colores rojos y gualdas, ofreciendo la apariencia de la señera catalana. El conjunto es una perfecta estelada independentista. El arraigo y familiaridad a esta bandera por el pueblo catalán está marcado en la memoria genética de los catalanes.
La República Catalana y los Reyes Magos
Es por ello que la ANC y Òmnium Cultural han animado a llevar esteladas y farolillos estelados en la Cabalgata de Reyes en honor a la estrella que un día atrajo a los referidos monarcas. La única petición política que pretenden es solicitar a sus Majestades que traigan la República Catalana. Valga la contradicción y a los demás que les den.
Pensamos que a sus Majestades los Reyes de Oriente no les hará mucha gracia esa petición. En fin, ya se sabe: como dice Ramón de España, esto es «El manicomio catalán«.
¿ Reyes de Oriente ? hay firmes sospechas que los Reyes venían del Pallars Sobirà y venían, por tanto, de Occidente, no de Oriente. En casa, para respetar la falsa historia a todos explicada, les decimos a los niños que los Reyes eran de cerca de Santa Coloma de Farners que sí está al Oriente